En los almacenes del Bike Club, a veces recibimos devoluciones de bicicletas que parecen nunca haber sido usadas. Aunque esto facilita el trabajo de los mecánicos, es un poco desalentador imaginar que las bicicletas han estado en un garaje, armario o balcón durante un par de meses acumulando polvo hasta que se ha decidido que los niños no están interesados después de todo.
Si acabas de comprar/suscribir a una bicicleta y tu hijo no está tan contento con ella como esperabas, no tiene por qué ser el final del camino. Hay muchas razones por las que los niños no se aficionan inmediatamente a la bicicleta, así que a continuación repasamos algunas de ellas y te damos algunas ideas de medidas que puedes probar. No existe una solución milagrosa para conseguir que tu hijo monte en bici y con cada peque será diferente, pero merece la pena ver si alguna de las siguientes cosas funciona.
Deja que lo descubran solos
A veces, los padres pueden ser un poco insistentes. Lo que pretende ser un
estímulo positivo puede encontrar resistencia si el niño se siente obligado a hacerlo
en contra de su voluntad.
Al parecer, el campeón olímpico Sir Chris Hoy tuvo problemas para animar a su hijo
a coger una bici sin pedales por este motivo. Al final, descubrió que, simplemente
dejando la bicicleta en un rincón de la habitación durante un rato, su hijo sintió una
curiosidad natural por ella y empezó a jugar con ella. El consejo del medallista de
oro es que los niños aprendan a su propio ritmo. Un poco de paciencia y la
colocación estratégica de la bici en casa puede ser todo lo que necesites.
Ayúdales a ganar confianza
La falta de interés puede ser sólo un síntoma de inseguridad. Aunque sepan montar en bici, aún les quedan muchas cosas por aprender a medida que avanzan. Por ejemplo, si acaba de subirse a su primera bicicleta con marchas, ¿sabe cómo utilizarlas?
Puede que se haya quedado atascado en la marcha más larga y que le cueste empujarla, lo que le ha quitado las ganas de volver a montar en bici. Puede que el sillín esté demasiado alto y no se sientan seguros al frenar. Cuando están aprendiendo a montar en bicicleta, es posible que los niños no digan por sí mismos si algo va mal, por lo que preguntarles puede ayudarles a identificar cualquier problema. Enseñarles a resolver estos problemas contribuirá considerablemente a aumentar su confianza.
Es mejor con amigos
Especialmente para los niños más mayores, los paseos de siempre con los padres pueden acabar resultando aburridos. Una buena forma de hacerlo más divertido puede ser invitar a algunos de sus amigos. Es posible que los niños que antes eran reacios a montar en bici cambien de opinión sorprendentemente cuando vean a sus amigos pasarlo bien en bici y quieran unirse también.
¡Hazlo divertido!
Haz que el ciclismo sea divertido
El ciclismo puede ser muchas cosas: un deporte, una forma de mantenerse en forma y sano, una manera de disfrutar de la naturaleza... pero, sobre todo, ¡el ciclismo debe ser divertido! Si un niño asocia subir a la bicicleta con largas y pesadas caminatas, probablemente no querrá hacerlo. Hay muchas maneras de hacer que un paseo en bici sea más que eso. Puedes convertirlo en una búsqueda del tesoro, combinarlo con un picnic o jugar a Simón dice.
Por último, recuerda que los niños son niños. A veces, no quieren montar en bici durante una hora, sólo quieren salir a dar una vuelta. Pero esperamos que estos consejos te den alguna idea de qué hacer antes de que empiecen a acumularse telarañas en la bicicleta.
Si quieres más ayuda para que tu peque se suba a las dos ruedas, también tenemos una guía paso a paso para enseñar a tu hijo a montar en bici, y un blog sobre cómo montar en bici sin pedales.
Preguntas que nos hacen cuando un niño no quiere montar en bici:
¿Por qué mi hijo se niega a montar en bicicleta?
Los niños pueden resistirse a montar en bici por miedo, incomodidad o falta de interés. Trata de averiguar cuál es el problema y luego, poco a poco, exponlos a la bicicleta. Sobretodo mantén la calma y procura transmitirle tranquilidad, ¡la paciencia es la clave!
¿Cómo puedo animar a mi hijo a disfrutar de la bicicleta?
Hay muchas maneras de animar a los peques a disfrutar más montando, puedes probar a planificar rutas divertidas, invitar a sus amigos a unirse o introducir juegos como Simón dice. Las asociaciones positivas, las recompensas por el esfuerzo y el aspecto social pueden ayudar a crear un entusiasmo por montar en bici duradero en los peques.
¿Existen motivos comunes por los que los niños eviten montar en bicicleta?
Entre los motivos más comunes para evitar montar en bici se encuentran el miedo a caerse, la incomodidad o el aburrimiento. Animar a los peques a comunicarse abiertamente, hacer los paseos más divertidos y solucionar problemas específicos que puedan haber mediante ajustes pueden ayudar a su hijo o hija a superar estos obstáculos y a divertirse montando en bicicleta.